La pandemia generada por el COVID-19 ha puesto de manifiesto que la tecnología es, en la actualidad, una parte esencial de nuestra vida y, por ende, de la educación. Sin su implantación, la situación para millones de estudiantes habría sido muy diferente durante este periodo de nuestra historia reciente. Pero la tecnología va a estar presente más allá de los momentos de crisis. Poco a poco, se va a integrar en los procesos de aprendizaje escolares y universitarios de todo el mundo.
Es esencial que profesores y docentes utilicen esta herramienta de la forma adecuada, para ayudar y facilitar el aprendizaje a sus alumnos, así como para lograr que tengan un mayor acceso a información que, de no ser por la tecnología, nunca llegarían a conocer.
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